Parejitas

La vida sigue.

Uno se va de los sitios, o de los ambientes, o del barrio, y tiene la impresión subsconsciente de que las cosas siguen igual aunque pase el tiempo. Y de que cuando decidas volver podrás recuperar lo que dejaste, lo que te gustaba, o lo que querías. Pero no es cierto, todo cambia.

Realmente han pasado solo un par de meses, desde Nochevieja, en algunos casos mucho menos porque estuvimos en el cumple de Ascen hace poco, y en otros desde mi cumpleaños en Octubre que no veía a alguno de los de la panda.

Y el viernes celebramos una de nuestras tipicas cenas amenizadas con guitarras y excelente humor. Por fin encontramos un sitio en que nos dejen juntarnos 20 - 25 personas una noche, que nos den de cenar decentemente sin arruinarnos y que después nos dejen estar haciendo ruido hasta las 4 o 5 de la mañana (en mi casa se fueron los últimos a las 6, pero no me puedo permitir esos lujos más de una o dos veces al año por si las moscas).

Fue fenomenal, divertida como pocas. Cenamos, cantamos, bailamos (algún día aprenderé de una vez a bailar las dichosas sevillanitas, de momento me conformo con seguir las instrucciones de mi amiga: Vuelta, Pasa, etc..... como un robotito que siempre va con retraso respecto al resto de las parejas, pero aún así me parece divertidisimo) y me senti tan cómoda con ellos como si no hubiera dejado de verles ni un fin de semana como antes.

Pero las cosas cambian. Resulta que solo, lo que se dice solo, no había casi nadie. Poco a poco, no sé muy bien como, pero la mayoría estaban emparejaditos. Que si fulanito, el Don Juan al que no he visto pareja formal en dos años ha conocido a una chica monísima y la trae muy orgulloso, que estos otros dos que conoci por separado y que casualmente en mi cumpleaños salían juntos en las fotos llevan meses de parejita, que aquella otra que estaba triste y sola hace cuatro meses está radiante y dandose besitos con nuestro amigo el Chiqui (un día hablaré del Chiqui, tiene su historia tambíén) y los dos superenamorados.

Aparentemente libre mi amigo el Cigarra (que sigue enamorado de su jovencita de 18 años de otras tierras, pendiente de ver si se viene o no se viene), el guaperas que tiene su novia a trescientos kilómetros y no se ven más que cada 15 días (pero que ahí está, y la conocemos todas, de hecho estuvo en mi casa en Nochevieja), el gafitas con cara de ratón de biblioteca (que también me presentó a una amiga hace unos meses) y Ascen (la única sin pareja conocida por los demás).

En resumen, que de los veintitantos, que si por aquí, que si por allá, todos tienen (o tenemos) un rollito del tipo que sea. Siempre pensé que eran (éramos) solitarios impenitentes pero basta con que me vaya un par de meses para que todos estén colocaditos.

Asi cuando decida volver (cualquier día de estos.... ) a mi vida solitaria me voy a tener que buscar otra troupe de solitarios porque esto no hay quien lo aguante.....

Y por si fuera poco el guaperas, cada vez está más guaperas, y cuando se pone al lado de CB, cachis....... qué mal.... Y el puñetero sigue siendo tan galante, cortejador, meloso, y todo lo que se te pueda ocurrir, igual que siempre, así que no se corta en decirme doscientas veces lo guapa que estoy, eso de que él y yo tenemos un asunto pendiente, que yo le intereso, etc... etc.....

Aunque sé que es todo pura pose, que después se queda en ná porque termina hablándote maravillitas de su novia de provincias, y que si yo le interesara un poquito tiempo ha tenido para demostrarmelo, pues, qué quieres que te diga? que muy mal... que me diverti mucho pero en ese sentido me vine bajita de moral. Que cambiaba de chico ya mismo. Que esto no puede ser.

Y yo con este ............ :-)))